30.6.15

Cuando cae el sol.

Un paisaje apocalíptico rodea mi ciudad. El viento traslada las rojizas nubes sobre su turbulento mar.
De pronto me veo rodeado entre huracanes sacudiendo hojas secas y arena que me golpean el rostro. Busco un reparo en vano, las luces se apagaron, todos los corazones ya se acostaron, deben estar cálidos, entre cobijas abrazados, acompañados.





Somos simples mortales casi perfectos.

¿Estará ahí?, ella, ¿estará ahí?

28.6.15

No quiero soñar mil veces las mismas cosas...

Cuanta inmensidad puede caber en una sencilla persona. ¡Cuánta belleza!

No es difícil enamorarse de ella, de su tez blanca y suave, de su sedoso pelo negro.
Divino rostro, con perfectos detalles, podría volver loco hasta al cuerdo más cuerdo...
¿Será su impactante e hipnotizante mirar? ¿Serán sus deseables labios rojos? ¿Acaso su femenina seriedad, o sus sanas costumbres? ¿Su perspicaz inocencia?
Podrían ser también sus gustos por la buena música y los libros...

Lo único que puedo afirmar es que sabe como volar entre letras.

Es injusto no saber nada de ella.

...Y después escucho que la perfección no existe...

15.6.15

El vacío se lleno, pero no de lo que quisiera.

Con los labios morados de una noche fugaz e invisible,
remonto el vuelo en el alba, que me abraza desnudo.
Sin piel pero con alas. Sin camino pero con sentido.
Descubro la soledad que me rodea sin atraparme,
descubro el vacío y las letras con que llenarlo.
Enloquece mi alma recordando viejas aventuras.

Y anhelo, con todo el pecho, volver a encontrarme.

Labios morados por jugar con el tiempo,
comprendo que pasa volando, sin intentar atraparlo.
Me detengo un momento, me encuentro.
Quiero todo aquello que una vez soñé. Veo.
Hasta que los rayos del sol me vuelven a cegar.
Intento enfocar, quiero ver todo una vez más.

Con la vista nublada y los labios morados
remuerdo los aspectos más bacanes de mi estar.

No estoy bien. No estoy mal.
No estoy quieto pero tampoco me muevo.

Otra vez los sueños, anhelos, deseos.
Es que no soy perfecto.
Aunque pueda creerlo...
Soy ateo.